Esperando que llegara la comida para los niños,
en la mesa,
surgió la sombra de un imponente carroñero.
Un joven arregla el arete de su mujer de calenda, antes de bailar. No es de oro, es de tapas doradas de botella.
Esperando que llegara la comida para los niños,
en la mesa,
surgió la sombra de un imponente carroñero.
Un joven arregla el arete de su mujer de calenda, antes de bailar. No es de oro, es de tapas doradas de botella.
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